Estoy harta del trabajo que estoy haciendo, que aunque pagará la renta del mes, pues no pagará la renta en satisfacción.
Con sólo $10 en la bolsa amaneció hoy sábado, lleno de decisiones por tomar. Escribí tres cartas una para mi tía, otra para mi amiga F y la otra ya no me acuerdo para quien es, pude quedarme todo el día tirada viendo tele, pero decidí tomar el camión para ir al correo.
Ya no aguantaba el olor a sudor, pero ni así me bañe, me lavé la axilas, me puse desodorante y así me fui.
Descubrí que no se nada todavía sobre los camiones, tomé el primero que pasó que por suerte me dejó en el correo. Dudé por un minuto que estuviese abierto, porque todas las luces estaban apagadas con excepción del escritorio de atención al público, pude ver el horario en la ventana, cerraban a las 2 y apenas eran las 12:30, tenían las luces apagadas para ahorrar energía, que es básicamente todo el rollo del norte. Se fueron las cartas.
De reojo vi mi reflejo en una vitrina y todavía no se me quita la cara de asustada, traté de sonreír pero nada más me sentí peor. Caminé un poco por el centro para ir explorando “mis nuevos dominios” encontré el mercadito de los agricultores locales y si pensaba que estaba caro el anterior, éste es una ridiculez, ¡$4 por una cajita de blueberries! Más ridículo es que la gente lo pague.
Encontré por fin el Centro Bangs y un cafecillo escondido entre las calles donde al parecer se reúnen todos mis futuros compañeros. Reo´s café.
Sólo puedo pensar en comer pollo. Aunque mi sueño tal vez no esté tan lejos. El supermercado Big Y como estrategia de mercadotecnia tiene un sistema de recompensas. Por cada compra recibe una moneda de un color intercambiable por artículos. Nos costó un rato descifrar el sistema de los colores, pensamos que era proporcional a la cantidad de compra, pero ayer sin preguntar me di cuenta que es completamente al azar.
Ayer por $10 de compra, me gané una moneda dorada, misma que puede ser intercambiada por una bolsa de 10 oz de alitas BBQ o bien por un pollo rostizado pagando la diferencia de $3.44.
Decidí tomarme un café en Reo´s para irme adecuando a los lugares, $1.50 la taza de café. ¿Para llevar o para tomar aquí? ¿Cuál es la diferencia? Como buena tomadora de café debería de saberlo. La diferencia es el material de la taza, para llevar taza de papel, para tomar ahí taza de losa.
Un hombre sentado frente a mi, me llama la atención, cabello largo negro rizado, cara redonda, ojos grandes, pero no solo eso tiene una cicatriz casi idéntica a la mía en el lado izquierdo de la frente. Lee el periódico, no puedo evitar pero lo veo constantemente, me parece natural acercarme a preguntarle sobre su cicatriz, pero lo pienso un poco.
Me distrae el extraño de deseo de robarme la taza que me han dado. Es vieja y esta percudida, pero es lo que me llama de ella, no lo puedo resistir, es un objeto que tiene historia, me atraen los objetos que tienen historia, que han sido útiles que han librado batallas.
Me termino el café, devuelvo la taza y me acerco al hombre:
- Disculpe que lo moleste, pero no puedo evitar ver que tenemos una cicatriz casi idéntica, le puedo preguntar ¿que le pasó?.
Extrañado me contestó
- ¿Qué? Estoy ocupado déjeme en paz
De repente tuve la certeza, una voz interior me decía que su nombre era John
- ¿Es su nombre Jonh? Dije
El hombre sólo me miró y ya no contestó
Espero el camión de vuelta a casa, no puedo esperar llegar para escribir esto.
2 comments:
Ansiedad, soledad, incertidumbre: lo desconocido.
Suerte.
Me fascinan las coincidencias...
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